Clasifícate y gana Anatomía de tu alcancía
El ahorro es indispensable para cumplir las metas que nos tracemos a corto, mediano o largo plazo. Contar con una buena estrategia en este sentido nos llevará al éxito o al fracaso de éstas, pero ¿sabes si el tipo de ahorro que manejas es el adecuado para tus propósitos?
1. Elige la respuesta que más se acerque a tu definición. Para ti, ahorrar es…
a) Apartar dinero para enfrentar situaciones inesperadas.
b) Destinar parte de tu ingreso para formar un patrimonio para los tuyos o cuando ya no estés.
c) Prepararse para momentos importantes, como el ser padre o algún aniversario.
d) Es una aspiración que tienes muy presente, pero que no has logrado consolidar.
2. De la siguiente lista de emociones, ¿cuáles son las que más te impulsan a ahorrar?
a) Miedo / seguridad.
b) Ansiedad / tranquilidad.
c) Preocupación / esperanza.
d) Estrés / confianza (quizá en exceso).
3. ¿Durante cuánto tiempo has logrado sostener tus ahorros?
a) De 6 meses a un año.
b) Cinco años o más.
c) Un año.
d) Menos de un año.
4. Te sentirías muy satisfecho si el dinero de tus ahorros los gastaras en…
a) Una reparación mayor del automóvil.
b) Adelantar pagos de tu hipoteca.
c) Un viaje para festejar algún cumpleaños.
d) Pagar tus deudas con las tarjetas de crédito.
5. ¿Qué tipo de instrumentos de ahorro has manejado para tu dinero?
a) Pagarés bancarios, a plazos no mayores de dos meses, por si algo se ofrece.
b) Fondos de inversión a largo plazo (la mayoría).
c) Fondos de inversión a corto plazo (la mayoría).
d) Cuentas de ahorro y/o efectivo guardado en casa.
RESULTADOS
Si tienes mayoría de a), eres un Ahorrador “botón de pánico”. A este tipo de ahorrador le gusta destinar su dinero a un fondo para emergencias económicas que le ayude a solventar desde un arreglo doméstico hasta un incendio o gastos de hospitalización. Y aunque la idea no es mala, lo ideal sería adquirir seguros para este tipo de eventualidades.
Ahorrar para una emergencia es importante, pues si pierdes tu empleo cuentas con un ahorro para subsistir mientras encuentras otro. Si eres éste tipo de ahorrador, los instrumentos de ahorro a corto plazo, son tu opción pues necesitarás tener disponible tu dinero en caso de emergencias.
Mayoría de b), Ahorrador patrimonial. Si estás en este rubro el objetivo de tu ahorro es comprar una casa. Y aunque utilices un crédito hipotecario para adquirirla, estás reuniendo recursos para los gastos iniciales del crédito como: el enganche, gastos de investigación, avalúo y escrituración.
Buscas tener una propiedad, pero también dejar un patrimonio a tus seres queridos, algo para heredarles, ya sea en forma de bienes o con alguna suma de dinero que logres reunir para ese fin. Es probable que este tipo de ahorrador ya tenga su testamento. Si perteneces a éste rubro, lo ideal es que ahorres en instrumentos a mediano plazo.
Mayoría de c), Ahorrador para los ciclos de la vida. Este tipo de ahorrador guarda dinero según la etapa de la vida en la que se encuentre. Ahorra para irse de vacaciones, para casarse, cuando decide tener hijos, para sus estudios, para su jubilación; en fin ahorra planeándolo todo. Va previendo sus gastos fuertes por temporada y crea un fondo para salir adelante de manera similar al ahorro para emergencias, aunque aquí el destino del ahorro seguramente será más gozoso. A este tipo de ahorrador le conviene invertir a corto, mediano y largo plazo, según el tiempo que tenga para cumplir con su plan.
Mayoría d): Ahorrador “jarabe de pico”. Es quien dice que está ahorrando para cualquier cosa, pero pocas veces logra reunir dinero, el cual se lo gasta a la velocidad de la luz. Se propone ahorrar, pero no lo logra. Luego, disimula (miente) sobre el capital que no tiene. Una buena opción para ayudarlo son los descuentos programados a su cuenta de nómina.
Para comenzar traza una meta alcanzable, en no más de seis meses (para que no te desesperes), y solicita a tu banco que te descuente cierta cantidad mensual para depositar en una cuenta de depósito, Cetesdirecto o aportaciones voluntarias a tu Afore. Una vez que pruebes las mieles del éxito, no te costará trabajo elegir otros propósitos que te lleven por este sano camino de las finanzas personales.
Fuentes: EGADE y Allianz Fondika.
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