la clave está en la clabe

¡Sácale provecho a tu cuenta!

Seguramente alguna vez te han pedido, o tú has solicitado, la Clave Bancaria Estandarizada, mejor conocida como “CLABE”, con el propósito de realizar o recibir algún depósito de dinero, ¿pero sabes cómo funciona? Aquí te lo decimos.

La cuenta CLABE es un número único e irrepetible para realizar transferencias de un banco a otro, las cuales pueden ser electrónicas o vía SPEI (Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios).
De esta manera, en lugar de acudir al banco de la persona a la que le vas a depositar, basta con que te proporcione su CLABE y entonces podrás solicitar a tu Banco, que haga la transferencia de fondos a esa cuenta sin importar en qué institución o Estado del país esté localizada.

Es importante saber que esta clave no sustituye el número de cuenta de cheques o de la tarjeta de débito, es sólo una referencia adicional para realizar transferencias interbancarias, es decir, de un banco a otro sin necesidad de mover el dinero en efectivo o cheque.

“La incorporación de la CLABE tiene por objeto darle mayor certeza y seguridad a las transferencias electrónicas interbancarias”.

La CLABE está compuesta por 18 dígitos:
6 corresponden a la información del Banco y sucursal local en cualquier lugar de la República.
11 corresponden al número de cuenta del destinatario de los fondos (a quien se le abonará el depósito).
1 corresponde al Dígito Verificador, el cual tiene como objetivo confirmar que los dígitos de Banco, sucursal y cuenta son correctos entre sí.

 

¿Dónde puedes encontrar tu CLABE?

• En tus estados de cuenta.
• En tu banca en línea.
• Tu Banco te puede decir cuál es tu CLABE interbancaria.

 

Ventajas de la cuenta CLABE:

• La usan todos los Bancos:
• Es rápida: se pueden programar transferencias para el mismo día.
• Es segura: la CLABE interbancaria únicamente sirve para depositarte. Así que puedes proporcionarla a cualquier persona que necesite hacerte un depósito sin temor de que tus datos estén en peligro.

Sin embargo, se puede llegar a confundir la CLABE con alguna clave o contraseña de tu tarjeta. Si alguien te pide la clave de seguridad de tu Banco, ¡jamás se la proporciones! 

 

Toma en cuenta estas otras recomendaciones:

• Anota los 18 dígitos de las cuentas a las que frecuentemente haces pagos, junto con los nombres correspondientes para no confundirlas.
• Cuando realices un pago, asegúrate que la leyenda o motivo de pago sea la correcta para identificarlo, pues con ella podrás hacer la aclaración con la institución en caso de ser necesario.
• Si vas a recibir alguna cantidad por este medio, solicita al depositante que use una leyenda o motivo de pago que los dos convengan, para facilitar su localización.
• Considera el cobro de comisiones, puede variar de una institución a otra.
• También es importante que tomes en cuenta los horarios que cada institución maneja para realizar transferencias, ya que dependiendo de la hora en la que se lleve a cabo la transacción, el dinero quedará acreditado.

La CLABE también es utilizada para pagar automáticamente servicios como el teléfono, agua, luz, etc; con cargo directo a una cuenta de cheques o a la tarjeta de débito a través del servicio “Domiciliación de pagos”.

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