¿Mis finanzas no son sanas?

Inicia el año con Educación Financiera.

Probablemente, al igual que miles de mexicanas y mexicanos, terminaste el 2020 con tus finanzas personales deterioradas y sin rumbo, por un lado, derivado de la situación que provocó la pandemia del COVID-19, que dañó nuestra economía, y por otro, la falta de previsión para tomar las medidas adecuadas.

Te preguntarás, ¿cuáles medidas? Y la respuesta es, las que nos hace adoptar la Educación Financiera, la cual nos permite prever situaciones que pueden dañar nuestras finanzas y nuestro patrimonio, además de que nos permite tomar decisiones informadas.

Y para que este 2021 lo comiences con una mejor planeación, te dejamos algunos aspectos básicos de la Educación Financiera. ¡Ponlos en práctica! Verás los resultados positivos al final del año.

Uno de los primeros pasos en la Educación Financiera es el Presupuesto y es sin lugar a dudas, la clave de unas finanzas sanas. Hacer un presupuesto es muy sencillo y muy importante para el control de tu dinero.

Realizarlo de forma habitual te traerá cuatro ventajas financieras que seguramente agradecerás:
• Tendrás el control de tu dinero.

• Identificarás gastos necesarios.

• Conocerás tus posibilidades de ahorro.

• Determinarás tu capacidad de endeudamiento.

¿Cómo armar un presupuesto?
Hacer tu presupuesto es muy fácil. Identifica y suma tus ingresos, nos referimos al dinero que puedes juntar en una semana, quincena o mes. Luego ordena y clasifica tus gastos, hasta el más mínimo que tengas. Resta tus gastos a tus ingresos y el resultado será tu capacidad de ahorro o de pago de un crédito.

Haz del ahorro un hábito
Como puedes apreciar, tu capacidad de ahorro la conoces con tu presupuesto. El ahorro no es una cuestión de ingresos, sino de hábitos. Todas y todos podemos ahorrar. La recomendación es guardar una parte fija, no importa si son 10, 20 o 50 pesos. Si lo deseas y te es posible manejar porcentajes: el 10% o 15% de tu sueldo es lo más aconsejable. Lo importante es que sea una cantidad fija.

Motívate. Establece metas a corto, mediano o largo plazo, que sean importantes para ti, pero también considera que sean realistas y alcanzables.

A la par de ahorrar para cumplir tu meta, considera crear un fondo para emergencias. Te hará sentir más tranquila o tranquilo en caso de un imprevisto, como: una cirugía, enfermedad o incluso, si te quedas sin trabajo.


Haz del crédito tu aliado.
El crédito es una herramienta que te abre muchas puertas financieras. Consiste en pedir dinero prestado a una institución para comprar algo, hacer pagos, o para algún tipo de inversión.

Existen diversos tipos de créditos: hipotecario, automotriz, empresarial y de consumo; en este último se sitúa la tarjeta de crédito, la cual tiene mayor demanda.

Solo recuerda que recurrir a un crédito tiene un costo (tasa de interés). Antes de contratar alguno te recomendamos pensar en las siguientes preguntas:

  1. ¿El gasto es urgente o puede esperar?
  2. ¿Cuánto me va a costar? Antes de contratar, infórmate de la tasa de interés y compara el Costo Anual Total (CAT), así sabrás cuánto vas a pagar al final del plazo. Recuerda, entre mayor sea el CAT, más caro será el crédito.
  3. ¿Podrás pagarlo? Asegúrate de que realmente podrás cubrir las futuras mensualidades.

Si ya te decidiste, recuerda leer todo el contrato antes de firmar, y no te quedes con ninguna duda, conoce tus derechos y obligaciones.

Todas y todos podemos invertir
Si bien es cierto que las decisiones de inversión no se improvisan, tampoco es un proceso complicado, cualquiera puede hacerlo, para comenzar solo debes contar con un ahorro, aunque no sea mucho.

¿En qué puedes invertir?
Si cuentas con un pequeño capital puedes invertir en:

Cetes. Certificados de la Tesorería de la Federación, son un instrumento de deuda bursátil emitido por el Gobierno Federal. Son pagarés para recaudar fondos en un cierto plazo y que generan rendimientos a quienes invierten en ellos. Puedes hacerlo desde 100 pesos.

Bono M. Es un Bono de deuda gubernamental, con tasa de interés fija. Se puede emitir a plazos de entre 3, 5, 10, 20 y 30 meses. Su valor nominal es de 100 pesos.

BONDE. (Bonos de desarrollo) son títulos de crédito nominativos y negociables emitidos por el Gobierno Federal, y se pueden emitir en un plazo mayor de 6 meses. Su valor nominal es de 100 pesos.

UDIBONOS. Son instrumentos que pagan intereses cada seis meses y cotizan en UDIS. Su valor nominal es de 100 pesos.

La importancia de un seguro
¿Te has puesto a pensar en la posibilidad de sufrir un accidente, una enfermedad, un imprevisto que acabe con tu patrimonio, incluso, la muerte? Aunque algunos de estos riesgos se pueden prevenir, cuando llegan de forma inesperada nada se puede hacer pero si proteger, a tu familia y patrimonio, ¿cómo?, mediante los seguros.

Los seguros son instrumentos financieros con los que puedes reducir los gastos que generan los accidentes, las enfermedades, los daños en nuestra propiedad, negocios y la propia muerte.

Existen muchos tipos de seguros para cada una de tus necesidades, por ejemplo:
• Seguro de vida.

• Seguro de gastos médicos mayores.

• Seguro de automóvil.

• Seguro de daños para el hogar.

Antes de contratar un seguro compara con diferentes instituciones y evalúa cual se ajusta mejor a tus necesidades.

¿Has pensado cómo será tu vida cuando llegue tu jubilación?

Todas las personas sabemos que el retiro es una etapa en la que normalmente dejamos de generar ingresos regulares por el trabajo, por eso es importante que lleguemos a él con los ahorros suficientes para vivir tranquilas y tranquilos y cómodos.

Al realizar aportaciones voluntarias a nuestra cuenta de Afore obtenemos:

• Mayores rendimientos. La tasa de rendimiento neto que ofrecen las Afores está por encima de las de otros instrumentos de inversión, por lo que te generará más dinero.
• Tu ahorro está seguro.

• Tus aportaciones son deducibles de impuestos.

• Ahorro a tu medida. Con tu Afore, tú decides cuánto ahorrar.

¡Cuídate de los fraudes!
Uno de los temas importantes de la Educación Financiera tiene que ver con la seguridad de tu dinero y bienes patrimoniales: la prevención ante posibles fraudes.

Existen varios tipos y entre los más frecuentes están: Dinero rápido. Te prestan ciertas cantidades de dinero de forma “fácil”, con largos plazos para pagar, sin consultar tu Buró de Crédito ni comprobante de ingresos.

Existen otros tipos de fraude:
• La clonación.

• Las transferencias electrónicas o retiros no reconocidos.

• Robo de identidad y falsificación de datos personales.

• Fraudes en cajeros.

Para que no te sorprendan y seas víctima de un fraude te recomendamos visitar el portal de Fraudes, de la CONDUSEF: http://bit.ly/2OLDptR

https://revista.condusef.gob.mx/wp-content/uploads/2021/01/sanas.pdf