Ludi Córdoba Delgado, Money Coach y Speaker TEDx

“Ya existen créditos hipotecarios en pareja sin necesidad de estar casados”

Mentora de Finanzas Personales en Querido Dinero, Ludi Córdoba es money coach experta en finanzas personales con más de 250 mentorías personalizadas y más de 1,500 asistentes a cursos, talleres y conferencias. Catedrática de Cultura Financiera en la Escuela de Negocios para el Tec de Monterrey Campus Monterrey y ponente para IMEF Universitario.

Apasionada por crear cultura financiera con perspectiva de género, Ludi es Lic. en Negocios Internacionales por la Universidad Anáhuac con un MBA por la Universidad Francisco de Vitoria (Madrid), contando con 8 años de experiencia en el área de finanzas personales y corporativas.

Recientemente estrenó el podcast “Jefas del dinero” en donde busca ayudar, especialmente a las mujeres, a reconciliar su relación con el dinero y crear prosperidad económica. TEDx speaker con la conferencia “El dinero es poder”.

En el mes del amor, Ludi nos habló acerca del crédito hipotecario en pareja y algunos de los mitos a su alrededor.

¿Cuál es la diferencia del crédito hipotecario en pareja respecto a un crédito hipotecario normal?

Los créditos en pareja también se conocen como “mancomunados” y a diferencia de uno individual, estos créditos nos permiten acceder a un mayor monto de financiamiento pues consideran los ingresos comprobables de dos personas, cabe mencionar que para algunas instituciones como el INFONAVIT ya no es necesario estar en sociedad conyugal para solicitar este tipo de créditos hipotecarios por lo que también puede hacerse entre familiares, roomies o amigos. La persona que genera mayores ingresos es quien firmará como acreditado y quien genere una cantidad menor de ingresos, quedará bajo la figura de co-acreditado.

¿Cuál es el principal requisito para solicitar un crédito hipotecario en pareja?

Los requisitos son los mismos a los de un crédito individual, en resumen, tanto acreditado como co-acreditado deberán entregar toda la documentación requerida para comprobar de dónde vienen sus ingresos que pueden ser recibos de nómina, estados de cuenta, facturas o declaraciones de impuestos. Asimismo, ambas partes deben comprobar su comportamiento en el Buró de crédito en donde es necesario que cuenten con un puntaje mínimo e historial positivo.

Si uno de los dos cotiza al IMSS y la otra persona al ISSSTE, ¿pueden solicitar un crédito en pareja?

Así es, el programa: “Financiamiento conyugal” ofrece un crédito directo para vivienda nueva o usada en los casos en donde los derechohabientes casados uno cotice al INFONAVIT y el otro al FOVISSSTE, siempre y cuando este último lo vaya a ejercer por primera vez.

Específicamente para este programa los derechohabientes deben estar casados y acreditarlo con su acta de matrimonio. Para los créditos hipotecarios bancarios es indiferente en dónde coticen los derechohabientes siempre que puedan comprobar que cuentan con un empleo formal y/o el origen de sus ingresos.

¿Cuál es el principal riesgo de los créditos hipotecarios mancomunados?

El compromiso es de ambas personas, así que tanto acreditado como co-acreditado son responsables de cubrir en tiempo y forma los pagos del crédito. Por esta razón el historial de crédito de ambos puede verse afectado en caso de que alguna de las partes deje de cumplir.

Cabe mencionar que sin importar lo que suceda a nivel personal en caso de una separación o divorcio, la situación del crédito no se verá afectada, ambas partes siguen siendo co-responsables.

En el peor de los escenarios, ¿qué pasa con el crédito mancomunado si uno de los dos fallece o se divorcian?

Los créditos hipotecarios son de largo plazo a partir de 10, 15 o 20 años, por este motivo las instituciones financieras incluyen un seguro de vida individual para el titular y el co-acreditado que tiene el propósito de cubrir el saldo pendiente del adeudo proporcional.

El pago de este seguro suele incluirse en la mensualidad del crédito o bien, al contratar una póliza con vencimiento anual, para que el seguro pueda pagar a la institución financiera, ambas partes deben estar al corriente con sus pagos.

Como se mencionó anteriormente, en caso de divorcio la estructura del crédito no se ve afectada por lo que ambas personas mantienen las mismas responsabilidades y derechos.

¿A nombre de quién queda escriturada la propiedad que se adquiere con un crédito hipotecario en pareja?

Como ambas partes son acreditadas, ambas partes tienen que estar de acuerdo con otorgar la propiedad como garantía real del crédito, por esta razón la escritura de la vivienda quedará a nombre de ambos cónyuges y de forma proporcional, cada uno pagará su parte del crédito.

¿Cuál sería tu principal recomendación antes de solicitar un crédito hipotecario en pareja?

Lo más importante es que antes de solicitar un crédito mancomunado, quede claro que se trata de un compromiso importante y a largo plazo (al menos 10 años), la propiedad a adquirir formará parte del patrimonio de ambos de forma proporcional por lo que estas son mis mejores recomendaciones:

• Hagan números en conjunto para conocer su capacidad de pago, es decir, el monto que pueden pagar cada periodo por las amortizaciones del crédito.

• Valorar sus necesidades de pareja en los próximos años (considerando el plazo del financiamiento) para elegir en conjunto una propiedad de un tamaño y precio adecuado a sus necesidades.

• Considerar la edad de ambos y el plazo del financiamiento.

• Es posible que en algún punto y por cualquier circunstancia el titular del crédito pierda el trabajo o genere menores ingresos que el co-acreditado, el compromiso de trabajar en equipo hará que puedan cumplir con el pago de su crédito sin afectar sus historiales en Buró de crédito.

• Nadie se casa con el objetivo de divorciarse, pero debemos pensar en que es algo que puede pasar. Consideren este tema en su negociación como pareja, y de ser posible, generen acuerdos que queden registrados en una cláusula que considere cómo proceder ante esta situación.

https://revista.condusef.gob.mx/wp-content/uploads/2023/01/laudi_275.pdf