¿Va a acudir a una casa de empeño?

Consejos para antes, durante y después de empeñar.

Sabemos que probablemente varias personas aún se encuentran subiendo la famosa “cuesta de enero” y que para lograr superarla tendrán que echar mano de ayuda extra y una de las más usuales en estas fechas son las conocidas: Casas de Empeño donde a cambio de algún objeto o prenda, te pueden prestar cierta cantidad de dinero.

Si bien, acudir a una Casa de Empeño no siempre es la primera opción que te recomendaremos, lo cierto es que muchas personas ante la urgencia del momento optan por hacer uso de estos servicios. Si este es tu caso y de verdad necesitas empeñar para salir del apuro financiero, aquí te dejamos varias recomendaciones para antes, durante y después de empeñar tu prenda. ¡Échales un ojo a todas!

Antes de empeñar.

• Antes de acudir a una Casa de Empeño, revisa otras alternativas como algún crédito personal o de nómina en alguna institución financiera, puede que estos productos se ajusten mejor a tus necesidades.

• Previo a empeñar tus bienes acude a varios establecimientos para comparar cómo funciona cada uno y qué condiciones de préstamo te ofrecen.

• Nuestra recomendación es que compares en al menos tres instituciones, fíjate siempre en: el Costo Anual Total, el porcentaje de avalúo de tu prenda y la tasa de interés anualizada. Escoge la Casa de Empeño que te de mejores condiciones.

• Considera tu capacidad de pago para la recuperación de tus bienes, recuerda que se trata de un compromiso donde deberás comprometer tus ingresos futuros para recuperar tu prenda.

• Antes de empeñar algo, verifica que se trate de una institución autorizada. El Registro Público de Casas de Empeño de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) puede ser una gran opción para que puedas verificar su estatus. Puedes consultar la información en: https://rpce.profeco.gob.mx/

Durante el empeño.

• Pregunta sobre los refrendos. Es decir, a cuántas renovaciones tienes derecho y el aumento del plazo establecido para recuperar tu prenda.

• Si vas a empeñar joyas o alhajas, fíjate bien en el pesaje de la báscula. Esta debe estar a la vista y que tú puedas verificar que efectivamente marcan los pesos de tu prenda.

• Al momento de estar empeñando tu prenda considera que te den una buena atención y te respondan todas las dudas que te puedan surgir, si no es así o te atienden con una mala actitud, es tu derecho a buscar otra Casa de Empeño.

• En México existen dos tipos de Casas de Empeño: las Instituciones de Asistencia Privada, que funcionan sin fines de lucro (como el Nacional Monte de Piedad y Fundación Rafael Dondé) y las empresas privadas, que generalmente cobran mayor interés sobre el préstamo.

Después del empeño.

• No olvides la fecha que tienes para retirar tu prenda, trata de saldar tu deuda con dos o tres días antes de la fecha de vencimiento y en caso de requerir más tiempo, solicita una ampliación o refrendo si el contrato lo permite.

• Si al final no puedes pagar el saldo que te prestaron, debes saber que existe una posibilidad de recuperar un porcentaje del valor de tu prenda mediante el derecho de demasía.

Para acceder a este derecho, solamente debes acudir a la Casa de Empeño con tu contrato o boleta de empeño, además de una identificación oficial vigente y pedir que se haga válida tu demasía.

Recuerda que si tienes algún problema con una Casa de Empeño o quieres levantar una queja, la instancia gubernamental para hacerlo es la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), ¡acércate a ellos!

https://revista.condusef.gob.mx/wp-content/uploads/2022/02/263_casa.pdf