¿Productos financieros para mujer?

Rosalaura y Pamela, quedaron de verse en un café, después de no verse desde la universidad.

Rosalaura: ¡Amiga! ¿Cómo estás?, te ves súper bien, cuéntame, cuéntame ¿cómo te ha ido?

Pamela: Pues me ha ido bien, salí de la universidad y quiero iniciar un negocio, quisiera estudiar más, quiero hacer muchas cosas, pero no sé qué hacer o si me va a dar la vida para lograrlo.

 

Rosalaura: Pero amiga, tienes todo por delante y te ves cabizbaja, como si se te hubiera muerto un gatito, ¿qué tienes?

Pamela: Mmm, me conoces bien… mira, a una amiga de mi mamá le diagnosticaron cáncer y su familia la pasa mal, le falta dinero… lo siento por ellos, pero también me da miedo que me pueda pasar a mí…

Rosalaura: Ay hermosa, pero tú te ves muy sana y bonita… pero si te preocupa tanto… ¿por qué no contratas un seguro?

Pamela: Pero no sé cómo, no entiendo qué hacen los seguros, además ¿se encargarán de enfermedades así?

Rosalaura: ¡Claro que sí amiga! Existen seguros específicos para las mujeres. Mira, hace tiempo un amigo que trabaja en la CONDUSEF me enseñó una página donde puedes encontrar lo que necesitas, se llama el Buró de Entidades Financieras.

Pamela: ¿Y este Buró es gratis? ¿Qué hace o qué debo hacer?

Rosalaura: Claro que es gratis hermosa, pues mira: en el Buró de Entidades Financieras se pública información de las instituciones financieras y cómo se comportan… Pero también las califica, por ejemplo, la calificación de Seguro de Gastos Médicos Mayores, te la voy a mostrar:

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Rosalaura: ¿Ves amiga? aquí te puedes enterar con quién te conviene contratar.

Pamela: ¡Wow! muchas gracias amiga, así me puedo enterar a dónde tengo que acudir.

Rosalaura: Pero aún más importante, puedes ver en el Catálogo Nacional de Productos y Servicios Financieros quién te ofrece qué y cuáles son los beneficios de cada producto.

Te voy a mostrar algunos de los que son especiales para mujeres:

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Pamela: De verdad muchas gracias, siempre supiste cómo levantarme el ánimo, voy a ver cuál seguro me conviene más.

Rosalaura: Obvio, siempre te puedo aconsejar. Yo me enteré de la existencia de esta página por un amigo, pero también me recomendó darle like y seguir al Buró de Entidades Financieras en redes sociales, está en Facebook y Twitter; desde que las sigo me entero de muchas cosas que me ayudan en mis finanzas personales.

Pamela: Ay, ya ni me digas, que deberíamos tener en la escuela una clase para eso, de verdad me confunde.

Rosalaura: La verdad nunca he ido a reclamar a la CONDUSEF, pero la información que tiene es muy buena.

Las jóvenes continuaron platicando hasta que Rosalaura se despidió por tener que irse al trabajo.

Rosalaura paga la cuenta y Pamela ve su tarjeta de débito “Cuenta Mujer”:

Rosalaura: Bueno amiga, pues estuvo muy rico y todo, pero ya me tengo que ir al trabajo.

Pamela: Ay amiga, me gustó mucho verte… ¿oye dividimos la cuenta?

Rosalaura: ¡No! ¿Cómo crees? Yo pago, tú apenas comienzas a trabajar.

Pamela: ¿También hay tarjetas de débito para mujeres?

Rosalaura: ¡Claro!, no te sorprendas amiga, hay cuentas de depósito, tarjetas de crédito, créditos para iniciar tu negocio. Todos éstos son especiales para mujeres, incluso en varios de ellos te ofrecen seguros como los que antes mencionamos.

Pamela: ¿También para el negocio? ¡Increíble! Creo que platicar contigo fue muy fructífero. Gracias.

Rosalaura: De nada amiga. ¡Recuerda seguir al Buró de Entidades Financieras en redes sociales! nos vemos que se me hace tarde.

Pamela sabía que contratar un producto financiero podía tomar tiempo, pero ahora está más tranquila sabiendo que el Buró de Entidades Financieras y el Catálogo Nacional de Productos y Servicios Financieros, le pueden facilitar esta tarea.

 

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