El misterio de la quincena

 

¿A dónde se va?

Si eres oficinista seguramente te sentirás identificado con este artículo, sobre todo, cuando decimos que la “quincena” es el suceso más esperado. Llegado ese día las palpitaciones del corazón se aceleran, una extraña sensación invade el cuerpo, sudan las manos y el alma descansa al checar en el cajero que “ya llegó Juan con la leña” y que el pago está completito, aunque la alegría solo sea pasajera porque en menos de una semana algo misterioso ocurre: ¡el dinero desaparece sin darnos cuenta!

Una característica común de las personas asalariadas que trabajan en oficinas o dependencias de gobierno es terminar la quincena sin dinero. Las razones pueden variar. Ya sea por bajos salarios, pretender una vida social de clase media o porque se realizan compras excesivas. Lo cierto es que muchos empleados batallan para llegar al final de la quincena con saldo positivo.

 

¿A dónde va tu quincena?
Antes de aconsejarte cómo manejar mejor tus finanzas, es importante localizar primero las fugas de dinero:

1. Transporte privado. De acuerdo con Coru.com, empresa FinTech en México y Brad.Feebbo, plataforma de encuestas, este sector laboral gasta en promedio 14 mil pesos al año en servicios de taxi o uber para garantizar la llegada a tiempo a sus centros de trabajo.
2. Comidas fuera de casa. Al pasar demasiado tiempo fuera, las y los oficinistas se ven orillados a consumir alimentos en lugares cercanos a su trabajo, lo que supone un gasto extra.
3. Convivios en la oficina. Con el fin de crear un ambiente de oficina amigable, los cumpleaños y festividades en la oficina suelen ser un pretexto más para la cooperación en la compra de pasteles y allí hay otra pequeña merma.
4. Café, frituras y otros gustitos. De acuerdo con Kantar Worldpanel, compañía mundial en datos, insights (ideas) y consultorías, las personas empleadas en oficinas gastan, en promedio, 50 pesos diarios en botanas, refrescos o pastelillos.
5. Viernes Social. Distraerse es importante debido al estrés de sus trabajos, sin embargo, las reuniones con amistades o familias suelen tener un gasto fuerte al visitar restaurantes, bares, centros nocturnos,etc.
6. Pequeños grandes lujos. Al igual que el punto anterior, para consentirse un poco, las y los oficinistas llegan a gastar de más en productos y servicios de lujo que muchas veces son innecesarios.
7. Los “inevitables” tarjetazos. Finalmente, cuando el peso de todos estos gastos recae sobre ellos, suelen recurrir a las tarjetas de crédito o a los préstamos para terminar la quincena, sin considerar el impacto que los intereses tendrán en su cartera. 

 

Ahora que conoces el “Misterio de la quincena de los oficinistas”, te damos algunos consejos para aprovechar mejor tu sueldo.

• Crea un presupuesto. Realiza un registro, por escrito, de tus ingresos y gastos. Recuerda incluir los desembolsos obligados (renta, luz, agua, alimentos, cuotas escolares, transporte, etc.).
• Utiliza transporte público. Puedes disminuir lo que destinas a este rubro si optas por hacer uso del transporte público y el privado solo en caso de emergencia.
• Que no se te olviden tus tuppers. Llevar tus alimentos puede disminuir considerablemente tus gastos.
• No despilfarres. Cuidarte no es lo mismo que mimarte, y aunque tienes derecho a disfrutar tu dinero, no hay razón para derrocharlo en cosas innecesarias.

Por último, te recomendamos ahorrar un porcentaje de tu sueldo cada mes.  De esta forma nunca más tendrás que preocuparte por el “Misterio de la quincena”.

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