Deseo vs Necesidad

Aprende y ahorra.

¡Hola peque!
¿Alguna vez se te ha antojado una rebanada de pastel o una nieve, un dulce? A quién no.

Seguramente has deseado también una bicicleta, una pista de carreras, una muñeca, una consola de videojuegos o un celular de última generación para estar en contacto con tus mejores amigos y ver videos divertidos, eso sí, después de hacer tus tareas y quehaceres de la casa.
A eso le llamamos deseos.

Ahora, por otro lado, estamos seguros de que has llegado a necesitar un libro, un cuaderno, lápices, zapatos o ropa nueva porque la que tienes ya está muy gastada, también alimentos, como frutas y verduras, carne, leche etcétera. O tus papás o abuelitos han llegado a necesitar un medicamento, lentes, muebles o aparato eléctrico en mejores condiciones.
A eso le llamamos necesidades.

Hay cosas que pueden gustarte mucho y las deseas por encima de otras tantas que son necesarias. Lo que debes saber es diferenciar entre “necesidades” y “deseos”.

¿Sabías que el dinero muchas veces es limitado en nuestras casas?, eso quiere decir que solo tenemos cierta cantidad, no más, por eso tenemos qué pensar bien cómo gastarlo. Esto significa que debemos decidir entre gastarlo en algo que necesitamos o en algo que deseamos.

Algunas cosas, como ya lo vimos, son necesarias para sobrevivir, pues si no las tuviéramos nos enfermaríamos, no podríamos trabajar o estudiar.

También hay otras cosas que nos hacen felices, pero que no son necesarias para seguir vivos o para estar bien.

Lo cierto es que tanto la comida, ropa, útiles, medicinas, juguetes y la mayor parte de lo que necesitas y te gusta, cuesta DINERO.

Por eso, debes valorar cada moneda o billete que obtengas. No siempre debes gastarlo, aunque algo se te antoje. Si lo guardas, te servirá para tener algo mejor después.

Y aunque a veces pienses que el dinero lo regala el banco o el cajero automático, lo cierto es que tus papás deben trabajar muy duro para comprar lo que te hace falta.

Recuerda:

Aunque en tu casa te den todas las cosas que necesitas, debes aprender el trabajo que cuesta conseguirlas. Siempre elige más tus necesidades (alimentos, ropa, útiles escolares, etc.) que lo que puedes desear (juguetes, celular, un antojo).

Ahora que ya sabes lo que es un deseo y lo que es una necesidad, ya puedes decirle a tus papás que también aprendan a diferenciar lo que es un deseo y lo que es una necesidad. Eso, te lo aseguramos, les va a ahorrar mucho dinero.

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