Un camino para mejorar su futuro

¿Qué porvenir quieres para tus hijos? Éste puede ser como te lo imaginas, si desde hoy lo planeas y ahorras.

La educación es un medio para adquirir, transmitir y acrecentar la cultura, además de ser un detonante para el desarrollo del individuo y un motor para generar el progreso de un país. Es innegable que la formación educativa provee a la persona de competencias y conocimientos que sirven como cimientos para la construcción de una trayectoria productiva e integral, ya que amplía las posibilidades de acceder a un trabajo bien remunerado1. Según la CEPAL, los estudiantes que

egresaron del nivel medio superior recibieron en promedio un salario mayor en 30% de quienes no lo cursaron.

¿Sabías que…?

Según el INEGI, el total de profesionistas ocupados en el país es de 7.3 millones de personas y las áreas con mayor ocupación son las Económicas Administrativas, Ingenierías y Ciencias Sociales2.

Sin embargo, de acuerdo con la Encuesta de Capacidades Financieras, poco más de la mitad de los padres entrevistados (55%) ahorra para la educación de sus hijos. ¿Has pensado cómo podrías garantizar su formación en caso de que fallecieras o quedaras incapacitado total o parcialmente? Anticiparte a la ocurrencia de eventualidades es una forma de proteger el porvenir de tus hijos, te mostramos el seguro educativo como una opción con la que cuentas.

¿Qué es el seguro educativo?

Producto financiero en el que el padre, madre o tutor del menor3 se compromete a pagar una prima —cantidad mensual, semestral o anual, durante un tiempo determinado—, por la que el beneficiario4 recibirá un monto para continuar con sus estudios al cumplir 15, 18 o 22 años5.

¿Cómo usarlo?

El primer paso consiste en definir la meta a la que quieres llegar, es decir, establecer el monto que quieres ahorrar para asegurar la educación de tus hijos, para ello debes tener una idea del costo aproximado de la carrera, éste regularmente se encuentra determinado por la duración y la escuela en la que planeas que estudie. Échale números, así podrás volver visible tu meta y lo que necesitas para cumplirla. Recuerda que no es lo mismo: “voy a empezar a ahorrar” que “voy a ahorrar 500 pesos al mes para la educación de mis hijos”.

Entre más pronto empieces, mejor.

Identifica el plazo que tienes para cumplirlo, considera que la edad del menor determina el tiempo máximo que tienes para acumular el monto de ahorro, es decir si adquieres el seguro cuando nace el niño tienes 15, 18 o 22 años para completar el monto, de acuerdo al plan que contrates. Así que entre más pronto empieces a ahorrar, más tiempo tendrás para llegar a la meta y probablemente los costos sean menores.

¿De a cómo?

Te mostramos el costo por institución del seguro educativo contratado por un adulto de 31 años y no fumador, para un menor de 3 años, sexo masculino y que reside en el D.F. El plan se contrató en dólares y con duración de 15 años6.

tabla

 

tabla2

 

¿Dólares, UDIs o pesos?

Con la finalidad de que la suma asegurada no pierda su valor adquisitivo, por los efectos inflacionarios, este producto generalmente se vende en dólares o UDIS (en caso de que lo contrates en pesos verifica como se ajustará la suma asegurada). Considera que el pago de las primas y de la indemnización correspondiente será efectuado en su equivalente en moneda nacional, de acuerdo al tipo de cambio vigente el día en que se realice la transacción, o bien a su valor actualizado.

Coberturas adicionales

El seguro es un traje a la medida, por ello existen coberturas opcionales que si bien, representan un gasto adicional, pueden resultar benéficas, en relación a la protección de los riesgos a los que te encuentras expuesto como contratante (tutor, padre o madre). Algunas son:

a) Fallecimiento: en caso de muerte del asegurado (tutor, padre o madre), la institución pagará a los beneficiarios designados por éste, el monto específico (suma asegurada) de la cobertura.

b) Invalidez total y permanente: si derivado de un accidente o enfermedad, el asegurado (tutor, padre o madre), se incapacita para desempeñar su trabajo habitual, la compañía pagará la suma asegurada correspondiente.

Antes de contratar, verifica los beneficios, requisitos, exclusiones y costos de estas coberturas, ya que varían de acuerdo al plan y la aseguradora con la que contrates.

¿Qué pasa si tu hijo decide no estudiar?

Uno de los objetivos de este seguro es alcanzar la cantidad que como contratante determinas (meta de ahorro), pero el destino que le des a ésta, es decisión tuya. Por lo que tú eliges en qué la ocuparás puede ser desde la educación de tus hijos o cualquier otro fin que elijas.

Descarga el pdf de este artículo, da clic aquí